En un mensaje por el final del Ramadán, Francisco expresa su angustia por la guerra y hace un llamamiento a las naciones para que pongan fin al conflicto en Palestina e Israel: La esperanza sólo nace "si sabemos reconocer el derecho de todo pueblo a existir y el derecho de todo pueblo a tener un Estado". Llamamiento a los cristianos de Oriente Medio: "Pueden profesar su fe".