El próximo mes de febrero se cumplirán 30 años desde que el Instituto de las Hermanas Ursulinas de la Virgen María Inmaculada de Gandino llegó a Polonia. Fundada por el Siervo de Dios don Francesco della Madonna, la comunidad comenzó su ministerio en la diócesis de Drohiczyn en 1995, desarrollándose después en Legionowo. Sor Laura Boschi, responsable del instituto en el país, habla a Vatican News acerca de las obras de su congregación en suelo polaco y del espíritu que las anima.