"En agosto de 2019 pasé dos semanas con la hermana Veera en Caltanissetta, Sicilia. Caminábamos por las calles, los migrantes la llamaban desde lejos y cuando nos acercábamos la saludaban llamándola cariñosamente 'mamá'". Así comienza el relato de la hermana Margaret Sunita Minj, en el que describe su encuentro con la religiosa india y su compromiso en Uganda y en Italia al lado de los pobres.