El arzobispo presidente de la Pontificia Academia para la Vida califica la elección de ayer de la institución comunitaria de "atraso cultural", indicativo de "una concepción individualista de la vida", que defiende el “yo” pero no el “nosotros”
El arzobispo presidente de la Pontificia Academia para la Vida califica la elección de ayer de la institución comunitaria de "atraso cultural", indicativo de "una concepción individualista de la vida", que defiende el “yo” pero no el “nosotros”